Madre de
la pequeña rechaza que su hija, víctima de explotación sexual, termine siendo
tratada como delincuente. Mientras tanto, el depravado sigue libre.
“Ella es la víctima. La forzaron a enviarlo. Hay un
pedófilo por ahí, pero están hablando de criminalizar a una niña”, dijo la
mujer.
Los
hechos se registraron en el sur de Reino Unido. La noticia ha causado gran
revuelo y polémica dentro de la opinión pública inglesa.
Todo empezó con un contacto hecho por el hombre a la adolescente a
través de una cuenta anónima de Instagram.
Inicialmente, el hombre se mostró amable y fingió ser alguien menor.
Mientras aumentaba la frecuencia de los mensajes, el
señalado pedófilo empezó a pedirle que le enviara imágenes subidas de tono.
Al final,
tras sufrir varias presiones, la pequeña aceptó y le envió una imagen con el
torso desnudo desde su Ipad.
Cuando la
madre lo notó, acudió al Centro de explotación infantil y protección en línea
de Reino Unido (CEOP).
Tras exponer su caso y contactar a la policía, un funcionario del CEOP
le notificó a la mujer que su hija podría enfrentar cargos criminales. Todo, porque según la ley, crear o
compartir imágenes explícitas de un niño es ilegal, incluso si es el mismo
menor quien envía una foto de sí mismo.