Detrás del lamentable hecho se escondería una nueva
modalidad de narcotráfico entre los dos países haciendo uso de vehículos de
transporte público. Este año, en similares circunstancias, han sido incautadas
alrededor de 2 toneladas de coca en Ecuador.
Al drama y el dolor que sufren las familias por sus
familiares del bus que se accidentó este martes en Ecuador, se suma un
ingrediente aún más perturbador: que los 38 pasajeros del automotor, sin
saberlo, habrían sido usadas como mulas del narcotráfico.
La Fiscalía reveló que hay evidencias técnicas de presencia
de cocaína en el bus accidentado. Según las autoridades de Colombia y Ecuador
en el vehículo fueron encontrados 80 kilos de cocaína.
La noticia no sorprendió a las autoridades ecuatorianas. No
es la primera vez que los narcotraficantes usan paseos turísticos
internacionales en bus y totalmente gratis, para enviar cocaína o marihuana
hacia destinos como Ecuador y Perú. Por lo general, sin que los pasajeros lo
sepan. Según las autoridades ecuatorianas, este año han sido incautadas
alrededor de 2 toneladas de cocaína en buses de servicio público que cruzan la
frontera.
El tema de los permisos y las presuntas falsedades en torno
a las autorizaciones de tránsito del bus y la acreditación del conductor,
terminan por enturbiar aún más la verdad sobre lo que realmente sucedió con ese
paseo.
Esas presuntas irregularidades administrativas reforzarían
la idea que esa tragedia fue producto de la suma de malas decisiones,
corrupción y desidia de las autoridades de control, y no una ruta mafiosa. Si
en algo se caracterizan los narcotraficantes es en no correr riesgos y cuidar
sus rutas mafiosas y en ese sentido un bus sin los documentos en regla, sería
como un tiro en el pie.
Por ahora, se sabe por boca de los familiares de los
pasajeros caleños, que el paseo lo convocó una vecina del barrio El Guabal de Cali;
ella también viajó y está herida de gravedad en un hospital ecuatoriano. En lo
único que coinciden todos es en asegurar que el viaje, la alimentación y hasta
el alojamiento, eran gratuitos, pero nadie da mayor explicación del por qué y
quién costeó esos gastos.
La respuesta más cercana a esos interrogantes, es que se
trata de un regalo que el dueño de una agencia de viajes le otorgó a una de sus
empleadas, pero esa versión no ha sido confirmada.
Otro hecho que llamó la atención, es la ruta que tomó el bus
para ingresar a Ecuador.
Tradicionalmente a ese país se ingresa por el puente
fronterizo de Rumichaca, no solo por seguridad, sino porque es el trayecto más cortó.
Sin embargo, el paseo caleño optó por desviarse y atravesar
los departamentos de Huila y Putumayo, para acceder al vecino país por un punto
fronterizo que se conoce como Sucumbíos. Como aparentemente el destino
turístico de los viajeros colombianos era una ciudad llamada Lago Agrio, que si
bien pertenece a la provincia de Sucumbíos, era más cerca llegar por Rumichaca.
En las versiones preliminares de los familiares de los
viajeros, aseguraron que esa ruta la cambiaron a última hora porque la vía
Panamericana que atraviesa Valle, Cauca y Nariño hasta llegar al punto
fronterizo de Rumichaca, estaba bloqueada. No obstante, esa tesis se cae de su
peso porque desde que se firmó el supuesto contrato el 10 de agosto pasado, se
trazó la ruta por Huila y Putumayo.
Más allá de todas esas suspicacias, lo único claro por ahora
es que fallaron los controles tanto en Colombia como en Ecuador, porque el bus
con los 38 pasajeros se paseó por ambos países sin causar la menor sospecha en
torno a la veracidad de sus permisos.
En Ecuador, el presidente Lenín Moreno reaccionó con
contundencia al separar de sus cargos a los funcionarios de alto nivel que si
bien no tuvieron relación directa con el caso, eran los responsables de las
dependencias llamadas a ejercer el control.
Ese error les costó el puesto, al director de la Policía de
Tránsito, al director de la Comisión de Tránsito y “a toda la cadena de mando
que no ejerció el debido control”, dijo el mandatario ecuatoriano en redes
sociales.
En Colombia, por ahora el balón de las responsabilidades
está en el terreno de la empresa Cooperativa de Transportadores del Oriente, a
la que estaba afiliado el bus. Pero el gerente de esa empresa, José Alberto
Ramírez sostuvo ante varios medios que el supuesto contrato que llevaba el bus
“es falso porque lo firma un gerente que no trabaja con nosotros desde enero de
este año y el membrete del documento no es el verdadero”.
fuente y leer mas en
https://www.semana.com/nacion/articulo/las-suspicacias-del-viaje-gratuito-que-termino-en-tragedia-en-ecuador/579576