Este miércoles será sepultada Camila Alejandra Tapasco Cerón, la joven de tan solo 15 años que murió luego de padecer más de ocho días de hospital en hospital, tras atragantarse con una espina de pescado en su casa de la vereda Honda Porvenir, zona rural del municipio de Pitalito.
El drama que vive la familia Cerón en medio del dolor de la pérdida de Camila Alejandra, esta matizado con rabia e indignación por lo que desde su punto de vista es una clara muestra de negligencia médica, tramitomanía de entidad prestadora de salud que no autorizó a tiempo el traslado de la joven terminado finalmente con su vida a bordo de una ambulancia cuando iba y venía luego de varias complicaciones.
Esta triste historia empezó el pasado vienes ocho de mayo a las en una vivienda de la vereda Honda Porvenir, allí la madre de María Alejandra había preparado para la cena mojarra frita, un plato que no era de los preferidos de la menor, sin embargo se comió el pescado con tan mala fortuna que se tragó una de las espinas atragantándola.
De acuerdo con el relato de Roció Cerón, tía de la menor, la niña fue trasladada en un vehículo particular hasta la unidad de urgencias del hospital San Antonio de Pitalito a donde ingresó a las ocho de la noche de ese viernes, allí le ordenaron remisión para Neiva, sin embargo la no disponibilidad de camas solo hizo posible que el traslado se efectuara hasta el mediodía del día domingo 10 de mayo hasta la clínica Medilaser en la ciudad de Neiva.
Allí fue intervenida el día lunes 11 de mayo, ese mismo día le sacaron la espina y se la entregaron, según la allegada aun anestesiada a la madre, siendo trasladada en un carro particular a Pitalito, sin embargo el drama continuó cundo paso el efecto del anestésico ya que Camila Alejandra comenzó a sentir fuertes dolores de pecho y abdominales que los obligaron a ir en dos ocasiones hasta la unidad de urgencias del San Antonio, de donde fue devuelta para su casa con analgésicos.
Sandra Patricia Cerón, madre de niña así lo relató, “fueron dos veces después de la cirugía que yo la lleve al hospital, me dijeron que le habían quedado un poquito de cuajarones de sangre por la sacada de la espina, ya en la segunda ida la dejaron porque se estaba complicando, dijeron que tenía una úlcera donde había tenido la espina, que por eso era el ardor, que por eso ella no comía, me dijeron no eso no es nada eso es que le quiso dar úlcera, ya el vienes mi hija siguió mala y mala, yo le dije a una doctora que si no sería mejor mandarla para Neiva, el sábado siguió peor y ya el domingo ella vomitó un pocotón de sangre, el doctor dijo no eso no es nada, yo le decía pero porque pasa eso, mi hija ya estaba desangrada, algo quedó mal en la cirugía, ella no paraba de botar sangre por arriba y por abajo”.
La niña fue envida nuevamente a Neiva el pasado domingo 17 de mayo, sin embargo no alcanzó a llegar al hospital Hernando Moncaleano Perdomo, su vida se apagó en la ambulancia que la trasladaba.
Su madre narró este hecho con un desgarrador relato y visiblemente afectada, “yo le dije mamita usted porque botó esa cantidad de sangre, ella me decía mamita no sé, tengo dolor, entonces yo me fui a traer ropa, al ratico cuando entre la vi ya rebosada de sangre por la naricita y la boca, ya estaba reventada, ahí la trasladaron para Neiva, pero dijeron que no se sabía si alcanzaba a llegar porque estaba entre la vida y la muerte y en la noche llegando allá, ella se murió, pero lo vieron desde por la mañanita y porque no hicieron nada, porque no la remitieron rápido, ellos me mintieron que era la úlcera y perdí a mi hija…”
Camila Alejandra Tapasco Cerón, cursaba noveno grado en el colegio Winnipeg de Pitalito, su cuerpo es velado en su casa y será sepultada este miércoles en Pitalito, su familia anunció que llegará hasta las últimas consecuencias para que esta situación no le siga pasando a las personas, “esto está pasando en muchos hospitales de Colombia, esto no puede quedar impune, no pueden jugar con la vida de las personas, a los médicos cuanto les pagan, deben pagarles lo justo para que atiendan bien a los pacientes, la niña ya murió, hay que dejarla descansar, pero nosotros la familia valemos mucho, la EPS, si ven que esa entidad no sirve, porque las dejan operar”, declaró Rocío Cerón.