El sismo, que causó numerosos corrimientos de tierra, se
produjo a unos 62 km al sureste de Sapporo, la capital de la región de
Hokkaido, norte del país.
Este fenómeno ocurre apenas dos días después de que un
tifón causara importantes daños en la región occidental de Osaka.
Poco después hubo una réplica de
magnitud 5,3 en la zona y varios temblores secundarios durante la madrugada.
Unas fotografías aéreas muestran los estragos causados por un
corrimiento de tierra que arrancó todos los árboles de una ladera y sepultó
casas en la localidad de Atsuma, donde 39 personas estaban desaparecidas, según
el canal público de televisión NHK.
Los bomberos evacuaban a los demás
habitantes de esa ciudad en helicóptero.
El portavoz del Gobierno, Yoshihide Suga, informó de la
muerte de dos personas, y el canal NHK indicó que una de ellas era un hombre de
82 años, que se mató al caer por las escaleras de su vivienda a causa del
terremoto.
El medio de comunicación dio además
un balance de al menos 125 heridos.
"El temblor me despertó poco después de las tres de la
madrugada. Encendí la luz, pero se apagó justo después", contó Akira
Fukui, un habitante de Sapporo.
"Hubo una sacudida repentina, extrema. La sentí de forma
lateral durante mucho tiempo, se detuvo y volvió a temblar. Tengo 51 años y
nunca había vivido algo así", dijo por su parte Kazuo Kibayashi, un
responsable de la ciudad de Abira visiblemente conmocionado.
"Pensé que mi casa iba a derrumbarse, todo estaba patas
arriba", recordó. "Mi hija, que está en el instituto, estaba
aterrada".
Sin suministro eléctrico
Cerca de 4.000 militares se desplegaron en la región afectada
para participar en las labores de rescate, y su número debería aumentar hasta
unos 25.000 soldados, anunció el primer ministro, Shinzo Abe, tras una reunión
de crisis.
Según la compañía Hokkaido Electric Power, 2,95 millones de hogares se quedaron
sin electricidad después del terremoto, debido a la interrupción de la
actividad de todas las centrales de la región. Esas instalaciones retomarán el
suministro eléctrico de forma progresiva, indicó el ministro de Industria,
Hiroshige Seko.
El seísmo también perturbó los transportes ferroviarios y
aéreos. El aeropuerto de Sapporo
Chitose tuvo que cerrar, y se anularon todos sus vuelos, según la
agencia de prensa Kyodo.
Las autoridades avisaron del riesgo de nuevos seísmos.
"Las fuertes réplicas se producen a menudo en los dos o tres días
siguientes", dijo Toshiyuki Matsumori, encargado de la vigilancia de
tsunamis y sismos en la agencia meteorológica.
"El riesgo de derrumbes de viviendas y de corrimientos
de tierra puede haber aumentado en las zonas que sufrieron fuertes
sacudidas", declaró en rueda de prensa. "Pedimos a la población que
preste atención a la actividad sísmica y a las precipitaciones, y que no se dirija
a zonas peligrosas", dijo.
Japón se sitúa en la intersección
de cuatro placas tectónicas y sufre cada año casi el 20% de los seísmos más
fuertes registrados en la Tierra.
Todo el mundo recuerda lo ocurrido el 11 de marzo de 2011,
cuando un terremoto de magnitud 9,1 provocó un tsunami que dejó más de 18.500
muertos y causó un grave accidente en la central nuclear de Fukushima.
El terremoto de este jueves ocurrió cuando el archipiélago
apenas estaba superando el paso del potente tifón Jebi, que mató a 11 personas
en el suroeste del país.