Los hechos, según
relata el padre del menor Cristhian
Quinayas de tan solo 13 años, ocurrió el pasado mes de febrero del presente
mes, a unos metros de la universidad Surcolombiana; un vehículo los accidentó,
y sin pensarlo dos veces, el conductor huyó del lugar, desapareciendo para no
responder por los hechos.
El menor que recibió
varios golpes en su cuerpo, recibió una fuerte contusión en la cabeza, lo que
lo tiene en estado de coma, en la ciudad de Neiva, en la clínica UROS.
El menos ha sido
intervenido quirúrgicamente en varias ocasiones, y aunque el seguro de la
motocicleta de su padre, con quien se movilizaba el día del accidente cubre los gastos médicos, resulta
para ellos todo un calvario, poder responder por los gastos de transporte para
poder cuidar el niño en la ciudad de Neiva.
El menor, es
cuidado por su padre, su mamá y una tía, quienes se turnan para poder acompañarlo
y brindar información o alguna ayuda que sea requerida en el centro médico.
Su padre, recorre
las calles de Pitalito, vendiendo rifas para poder recolectar dinero, para sufragar
los gastos de transporte hasta la capital del departamento.
“No es fácil hacer
algo como esto, la gente lo trata mal a uno, le dice cosas, que es un vago, y
uno solo se queda callado, aunque hay personas de buen corazón que si nos ayuda”
menciona el padre del menor.
Aquí la información, para quienes deseen ayudar a esta familia.