Albañil ganó dos veces la lotería en menos de un mes y podría ir a la cárcel

 

Un hombre de nacionalidad brasileña establecido en Italia contó con la increíble fortuna de ganar 3 millones de euros ($13.846.270.867 pesos colombianos) en 20 días gracias a la lotería por medio de dos cartones de raspa y gana.

La inusual suerte de este albañil de 40 años empezó el pasado 4 de febrero, cuando compró un cartón de lotería en la provincia de Móneda que venía premiado con 1 millón de euros. Tres semanas más tarde, el ganador, en compañía de un amigo, compró un nuevo tiquete, esta vez en la provincia de Verona, que duplicó el premio anterior.

Ambos billetes de lotería fueron depositados en el banco Peschiera del Garda.

Lo sucedido llamó la atención del servicio de vigilancia del Banco Central italiano (Bankitalia) por el simple hecho de que la probabilidad de que algo así ocurra es “cercana a cero”.

Bajo la sospecha de que se podría estar filtrando información fraudulenta por parte de los empleados de la empresa de los billetes ganadores, Lottomatica, los investigadores y especialistas de Bankitalia rastrearon los últimos movimientos financieros del albañil y descubrieron una transferencia realizada a finales de marzo por el valor de 800.000 euros al Banco do Brasil.

El hombre de 40 años, según investigaciones y reportes del medio Corriere del Veneto, llegó a Italia hace 3 años, vive con su esposa e hija y su labor es alicatar y soldar.

El caso fue trasladado a la Guardia de Finanzas donde se pudo comprobar que hay rastros de acceso sin autorización al sistema informático de Lottomatica.

Al conocerse esto último, una jueza de Verona ordenó un embargo preventivo del total ganado e imputó el cargo de lavado de dinero al hombre brasileño y a su amigo, relacionado como cómplice, quien lo acompañó en la última compra.

Según las autoridades, que ya investigan a tres empleados y un gerente de Lottomatica, el brasileño ya planeaba la compra de un tercer boleto, esta vez, por 5 millones de euros.

Mientras tanto, el abogado defensor del caso, Giovanni Chaicarini, declaró: “puede parecer poco probable, pero mi cliente es una buena persona y tuvo mucha suerte”.

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