Dos jóvenes estudiantes de secundaria que, al parecer, se movilizaban a gran velocidad en una motocicleta, perdieron la vida cuando el vehículo se salió de la vía y chocó contra un árbol, en zona rural del municipio de Neiva.
El siniestro
ocurrió este jueves en la madrugada en cercanías al centro de eventos y
recreación Creando, en la carretera que de la capital huilense conduce al
corregimiento de El Caguán en el sur de la ciudad.
Se trata de
Dilan Julián Betancourt Lozano y Kevin Santiago Puentes Naranjo, quienes se
movilizaban en una motocicleta de color negra AKT de placa KXL62F. “A los
occisos no se les halló ningún documento de identificación, cómo tampoco del
automotor”, dijo un vocero de la Policía Metropolitana de Neiva.
Las primeras
pesquisas señalan que la motocicleta, al parecer, iba con exceso de velocidad,
el conductor perdió el control, saliéndose de la vía y chocó el vehículo contra
un árbol.
Los dos
jóvenes murieron en el lugar del accidente, tras las graves heridas que
sufrieron por el golpe. “Al llegar al lugar se encuentra a las dos personas sin
signos vitales”, indicaron portavoces de los organismos de seguridad.
La trágica
muerte de los menores conmocionó no solo a sus familiares, sino a la comunidad
educativa de la institución El Caguán donde cursaban sus estudios de
bachillerato. “Expresan sus sentidas condolencias a familiares y amigos, y se
unen de corazón al dolor que los enluta, y formula fervientes votos para que
puedan alcanzar el consuelo y resignación ante tan triste partida”, expresó el
rector Luis Orlando Mosquera Suaza, a nombre suyo y de los directivos docentes,
docentes y administrativos.
Betancourt
Lozano cursaba grado once en la sede principal en la jornada de la mañana,
mientras que Puentes Naranjo se encontraba en el grado noveno en la sede El
Triunfo.
Unidades de
criminalística de la Secretaría de Tránsito y Movilidad de Neiva asumieron el
siniestro vial en coordinación con la Fiscalía Décima Local.
Los cuerpos
sin vida fueron trasladados a la morgue de Medicina Legal donde fueron
entregados a sus familiares.
Fuente: La Nación.