El pasado jueves, 2 de febrero, un aberrante caso de maltrato
familiar en menor de edad se presentó en la ciudad de Bucaramanga. Un niño de
tan solo dos años murió luego de haber sido llevado con varias heridas y signos
de abuso al Hospital Universitario de Santander (HUS) por su madre y su
padrastro, hoy capturado por ser el principal sospechoso y presunto agresor del
menor.
De acuerdo con reportes de las autoridades, el capturado,
quien responde al nombre de Orly Alexander Gil, de 28 años y nacionalidad
venezolana, deberá responder ante las autoridades por los delitos de homicidio
agravado, tortura y acceso carnal violento.
Esto luego de que el pequeño falleciera en el área de
urgencias del centro asistencial al cual había ingresado con graves heridas la
noche del pasado 31 de enero por, supuestamente, haber caído por unas
escaleras. Sin embargo, una vez ingresado el menor al hospital y habiéndole
realizado los respectivos análisis, los profesionales de la salud determinaron
que las contusiones y hematomas que presentaba no parecían ser producto de una
caída.
Durante casi 36 horas los médicos intentaron salvarle la vida
al niño; no obstante, esto no fue posible debido a la gravedad de las heridas
que, finalmente, terminaron por ocasionar su deceso sobre la madrugada del
jueves.
Dado el estado en el cual llegó el menor a las instalaciones
del hospital, las autoridades no descartan que este haya sido víctima de abuso
sexual; por lo cual se encuentran a la espera del dictamen de medicina legal
para esclarecer la causa de muerte y determinar el paso a seguir.
“Corresponde a Medicina Legal brindar ese informe, esa causa
probable de muerte del menor y si presenta alguna sintomatología que se tenga
que reportar y ser de conocimiento público”, dijo el general José James Roa,
comandante de la Mebuc, agregando también que, tanto la madre del menor como el
presunto agresor, tendrán que responder ante la justicia.