En el mundo, hasta el
momento, solo se habían descubierto tres
jirafas blancas y dos de ellas: madre y su cría fueron asesinadas esta
semana por cazadores furtivos.
El atroz hecho ocurrió en
una aldea del noreste del condado de Garissa
en Kenia, África y sus cadáveres fueron encontrados en un estado
esquelético por guardabosques de Ishaqbini
Hirola Conservancy.
El gerente de la reserva
natural, Mohammed Ahmednoor dijo que las dos jirafas asesinadas fueron vistas
por última vez hace más de tres meses.
«Este es un día muy triste para la
comunidad de Ijara y Kenia en su conjunto. Somos la única comunidad en el mundo
que son los custodios de la jirafa blanca», dijo Ahmednoor en un
comunicado.
«Su muerte es un golpe a
los tremendos pasos tomados por la comunidad para conservar especies raras y
únicas y un llamado de atención para un apoyo continuo a los esfuerzos de
conservación«, agregó Mohammed.
El Servicio de Vida
Silvestre de Kenia aseguró que solo queda una jirafa blanca, un macho y que ya
se está investigando el crimen.
Según expertos, su aspecto
blanco se debe a una condición rara llamada leucismo, que hace que las células
de la piel no tengan pigmentación.
De acuerdo con, la
Fundación de Vida Silvestre de África, Alrededor del 40% de la población de
jirafas ha desaparecido en los últimos 30 años y la caza furtiva de carne y
piel continúa.