En grupo especial de la
Fiscalía inició la investigación de los hechos, en los que murieron dos
comuneros indígenas en choques con la fuerza pública, en el municipio de
Corinto, norte del Cauca.
De acuerdo con la versión de
las comunidades indígenas, Abelardo Liz, reportero de la emisora comunitaria
Nación Nasa, del Cabildo de Corinto y el comunero Jhoel Rivera, fallecieron
producto de disparos que recibieron por parte de los integrantes del Ejército.
La situación se presentó
mientras se adelantaba un procedimiento de desalojo que era acompañado por el
Escuadrón Móvil Anti Disturbios, Esmad.
“El reportero indígena
estaba haciendo el cubrimiento para nuestros medios de comunicación
alternativos y fue asesinado por el Ejército”, denunció Ferley Quintero,
consejero Regional Indígena del Cauca.
“Nosotros no tenemos armas
como la fuerza pública, lo único que tenemos es
el bastón de mando”, indicó Ferley Quintero, quien añadió que en el
momento de los hechos no había presencia de grupos armados disidentes como lo
aseguró la fuerza pública.
Los nativos revelaron videos
en los que se ve a las tropas disparando desde la parte plana del terreno, muy
cerca de donde estaban las comunidades.
Mientras tanto, la Tercera
División del Ejército, se pronunció asegurando que las tropas no dispararon
contra los comuneros y que hubo un ataque de integrantes de la disidencia de
las Farc “Dagoberto Ramos”, desde la parte alta de la montaña.
Incluso el General Marco
Vinicio Mayorga, comandante de la Tercera División, dijo que había disidentes
de las Farc, camuflados dentro de las comunidades indígenas, por lo que cree
que los proyectiles que acabaron con la vida de estas dos personas fueron
disparados por los disidentes.
“Se presentó un ataque a la
tropa por parte de integrantes de la Columna Móvil Dagoberto Ramos, los cuales
se encontraban camuflados dentro de la comunidad indígena hurtando material de
comunicaciones e intentando secuestrar la tropa, lo que provocó la reacción de
las unidades”, detalló el general.
Los cuerpos de los indígenas
muertos fueron llevados a sus lugares de origen donde serán “sembrados” como
estas comunidades llaman al entierro de sus familiares.
Gremios
El sector agropecuario
también se pronunció lamentando los hechos que son materia de investigación.
Asocaña aclaró que no cuenta
con ningún cuerpo de seguridad privada en la zona, ni en ninguna otra parte
como lo manifestaron las comunidades indígenas.
“Rechazamos las
declaraciones emitidas por el Tejido de Defensa de la Vida y los Derechos
Humanos de ACIN, según las cuales dichas acciones fueron coordinadas entre el
Esmad, el cuerpo de carabineros de la Policía, el Ejército y la seguridad
privada de Asocaña”.
“En este sentido, aclaramos
que Asocaña no cuenta con ningún cuerpo de seguridad privada en la zona, ni en
ninguna otra parte”, dice parte del comunicado emitido.
El gremio también aseguró
que no coordina acciones con los organismos de seguridad del Estado que
desarrollan sus funciones en cumplimiento de órdenes judiciales y por último
espera que se esclarezca lo sucedido
Fuente Sistema Integrado de
Información