En la noche del sábado 27 de marzo en la zona rural del
municipio de Caloto, norte del Cauca fue hallado muerto Mario Fernando Herrera
Aparicio, funcionario del CTI de la Fiscalía General que fue secuestrado al
parecer por integrantes del grupo armado residual Dagoberto Ramos.
El servidor se desplazaba con una comisión desde Manizales y
cayó en un retén ilegal en El Palo.
Hombres armados se lo llevaron con rumbo desconocido junto a
una camioneta.
Tenía signos
de tortura.
El hallazgo del cuerpo se da horas después que el fiscal general,
Francisco Barbosa llegará a Popayán y anunciará el traslado de su despacho al
Cauca por la alteración del orden público.