Dos hermanitos fueron envenenados luego de que comieran un
poco de pan que habría arrojado una persona al perro de la familia y los
pequeños decidieran comerlo. El hecho ocurrió en San Antonio, en Veracruz,
México.
De acuerdo con la prensa mexicana, uno de los pequeños
falleció y el otro se encuentra en grave estado. Al parecer, los familiares se
dieron cuenta por la hermana mayor de los pequeños que vio la dramática escena.
Los pequeños identificados como Adriana de 5 y Jacobo de 7
años se encontraban jugando en el patio de su casa. Adriana llegó sin vida al
hospital.
Los padres de los tres niños desconocen el motivo por el cual
hicieron el aberrante hecho. Sin embargo, han manifestado que no es la primera
vez que atacan a su mascota.